Fernando Navarro, un joven que se encuentra en cuarto curso del Grado en Ciencia y Tecnología de los Alimentos de la Universidad Miguel Hernández de Elche, es el creador de Uala, una crema de champiñones sin gluten al más puro estilo guacamole o hummus, que ha ganado el certamen New Food que organiza su Universidad.
El premio de este concurso es de 400 euros, pero sobre todo la posibilidad de seguir concursando en certámenes de innovación alimentaria como Ecotrophelia España, y todo gracias a un concurso eel que Fernando ha presentado este proyecto, donde ha estado acompañado de Alberto Gento y Víctor Llorens, y que está basado en productos típicos de la Vega Baja, aunque el champiñón, un producto típico de La Manchuela fue el elegido por estos jóvenes, creyendo en el como un alimento al que se le puede exprimir muchas más opciones como la de la sostenibilidad, o la percepción social de poder usar esta materia prima como motor económico y demográfico de una zona que sufre el severo castigo de la despoblación.
Según sus creadores, un punto a favor de este compuesto de champiñón, es que se trata de un alimento que un gran potencial en mercados al alza como la comida vegana, además de ser apto para celíacos o ser ideal como acompañamiento para untar o acompañar productos como carnes o pescados.
Con este éxito, a Fernando se le han abierto unas puertas de cara al futuro que no esperaba, ya que su intención siempre ha sido incorporarse a alguna empresa para seguir creciendo, o realizar un máster de postgrado que lo cualifique en campos demandados en su profesión como la calidad y la seguridad alimentaria. Sin embargo, con Uala como piedra angular, estos jóvenes pueden encontrarse con un producto muy potente que les ayude a emprender.
Por el momento, el siguiente capítulo será desarrollar sus trabajos finales de carrera sobre este compuesto de champiñón para desarrollar de forma más profunda aspectos como la vida útil del mismo o la composición de las partes del producto que utilizar para su elaboración. A partir de ahí, estos estudiantes pretenden iniciar un proceso de emprendimiento, teniendo ya un producto sobre el cual trabajar, y el reconocimiento necesario para poder plantearse el difícil paso de montar una empresa.