La Navidad es un momento bastante delicado para celíacos y los sensibles al gluten... hasta el punto de que para no acabar contaminado, los celíacos deben seguir unas reglas básicas, no siempre fáciles de abordar. El portal Celicidad ha publicado el diario La Nueva España una serie de consejos para estos casos, que detallamos a continuación:
- Estar siempre alerta ante la presión social. Los celíacos suelen escuchar a menudo la retaila de "por un día no te pasa nada", pero no pueden entrar al trapo, ya que al tratarse de una enfermedad de base inmunológica, la más mínima cantidad de gluten provoca una respuesta en el sistema inmunitario del celíaco que actúa dañando las vellosidades intestinales para defenderse del gluten, proteína que confunde con un "enemigo".
- No bajar la guardia. Sobre todo si se trata de las primeras Navidades Sin Gluten, es necesario asegurarse de que todo lo que le ofrecen -en el restaurante o en casas de amigos y familia- es realmente sin gluten y se ha elaborado evitando la contaminación cruzada; si hay alguna duda, es mejor no consumirlo. Es necesario preguntar, y si no hay seguridad total, buscar otra opción.
- Comunicación cocinero-celiaco. Es necesario que el celíaco dialogue con los cocineros ocasionales propios de estas fechas, aportándoles unos consejos básicos y explicando qué alimentos son aptos, cuáles no y de qué manera organizarse a la hora de cocinar para evitar la contaminación cruzada.
- En la mesa. Es necesario que evitar la contaminación cruzada en la cocina, pero también hay que hacerlo en la mesa, ya que la más mínima cantidad de gluten ocasiona daño en el organismo del celíaco... de esta manera hay que estar pendiente de que el encargado de servir no pase el pan por encima del plato del celíaco, sino por detrás de la mesa, y cuando se trate de platos para compartir, lo más recomendable es que el celíaco coja su ración correspondiente antes que nadie y la coloque sobre su plato para evitar así la contaminación.
- Cuidado con la bebida. Ya seas o no celíaco, el alcohol no siempre es bueno... por suerte lo que se suela beber en estas fechas: cavas, sidras champán suelen estar libres de gluten. Sin embargo, no hay que bajar la guardia, y ante cualquier sospecha, es mejor comprobar los ingredientes o evitar beber.
- Fuera de casa. Gracias a Dios, a día de hoy hay una gran cantidad de restaurantes que ofrecen opciones sin gluten que además garantizan la usencia de contaminación cruzada. Lo más recomendable es que sea el propio celíaco el encargado de elegir restaurante y lo haga en función de las posibilidades sin gluten que ofrezca el establecimiento.