La Federación de Asociaciones de Celiacos de España (FACE) ha publicado el «Informe de Precios de 2018» en el que se estudia con carácter semanal, mensual y anual el gasto extra que supone para una persona celíaca seguir la dieta sin gluten. El estudio, que se realiza en base a una dieta de 2.000 a 2.200 calorías -que és la ingesta aproximada de calorías que recomiendan los nutricionistas para adultos sanos-, ofrece el resultado de que una familia con una perso­na celíaca entre sus miembros puede ver incrementado el gasto en la cesta de la compra en casi 21,42€ a la semana. Lo que se traduce en unos 85,68 € al mes, o lo que es lo mismo, 1028,22€ al año, sobre otra familia que no cuente con ningún celíaco entre sus miembros.

Se ha observado un aumento de precio tanto de los productos sin gluten como de los productos con gluten respecto al año 2017, siendo este aumento de 22,51€ para los productos sin gluten y 34,7 € en los productos con gluten.

El valor económico de los alimentos es significativamente superior en los pro­ductos sin gluten, encontrándose una mayor diferencia en las harinas de panifi­cación y el pan rallado, ingredientes que se suelen utilizar de manera frecuente. Estas diferencias suponen un incremento considerable en los gastos destinados a alimentación en una familia de clase media donde haya una persona que deba seguir una dieta sin gluten.

Esta diferencia tan elevada entre unos productos y otros puede deberse a varios factores, empezando por el au­mento del coste de las materias primas utilizadas, siguiendo por los controles de calidad y seguridad para evitar que exista contaminación cruzada durante el proceso productivo, mayores inversiones en I+D o la necesidad de adaptación de las instalaciones y/o maquinaria.

Las dietas expuestas en este informe aun siendo un modelo objetivo de cálcu­lo, no son una realidad práctica en la alimentación cotidiana. En el día a día, se suelen incorporar alimentos que no estando contemplados en la dieta ideal, se consumen con regularidad. Por lo tanto, se puede pensar que reflejar únicamente la dieta como el gasto producido por la cesta de la compra no es adecuado, por este motivo se han incluido una serie de alimentos que se consumen con relativa frecuencia y complementan la dieta de la mayoría de los ciudadanos. 

Para realizar este informe se han tomado como referencia los productos espe­cíficos ya que son los responsables de la diferencia económica entre una dieta con y sin gluten. Para ello se han utilizado alimentos presentes en la Lista de Alimentos Sin Gluten 2018. Es importante recalcar que para el estudio se ha realizado un muestro amplio eligiendo cada caso productos de precios elevados y marcas reco­nocidas, marcas de precios intermedios y marcas blancas.

Organizaciones

More Articles