Están empezando a aparecer numerosas marcas que ofrecen las bondades del mar convertidas en productos energéticos para uso deportivo, y justo eso es lo que ofrece la marca gallega Artio, que acaba de lanzar las barritas sin gluten Atlantic Energy que llegan al mercado con un contenido equilibrado de proteínas de clara de huevo, agua de mar liofilizada y alga espirulina. 

Con nombre de diosa Celta, este nuevo producto promete ofrecer numerosas bondades extraídas del mar. La idea base es que el agua del mar contiene, si está diluida en agua mineral en una proporción entre el 10 % y el 20 %, es decir isotónica, los mismos minerales y en la misma proporción, que nuestro plasma sanguíneo con lo que la absorción es rápida y aparentemente ofrece unos efectos fantásticos.

Con esa misma composición, la marca gallega Artio ha fabricado estas barritas que hacen que podamos comer los minerales del Atlántico, de forma que bajo el nombre de Atlantic Energy nos aportan un contenido equilibrado de proteínas de clara de huevo, agua de mar liofilizada y alga espirulina, y sin gluten entre sus ingredientes, lo que las hace aptas para celíacos.

De esta manera, no contienen azúcares ni cereales ni lácteos que puedan complicar nuestra digestion y posterior asimilación, y tan solo cuentan con ingredientes naturales, por lo que además de ser vegetariana son completamente apta para celíacos.

Cada barrita incluye una pequeña proporción de aceite de oliva virgen extra y almendras que le añaden su porción de grasas saludables. Los minerales del agua de mar incluidos en la barrita: sodio, cloro, potasio, magnesio, calcio… entre otros, nos facilitan la absorción de los carbohidratos y de la proteína y como para darle buen sabor han incluido algunos frutos rojos como arándanos o fresas, conseguimos además propiedades antioxidantes.

Las barritas vienen es unidades de 50 gramos, que es un tamaño que se consume en pocos bocados y de esta manera no hay que guardarla en la mochila a medio abrir con la posibilidad de que se ensucie todo, aunque lo cierto es que no son nada pegajosas, su textura es bastante agradable y se parten con facilidad, por si las queremos compartir.

Por otra parte, no se notan ingredientes raros y el sabor de la sal incluida pasa desapercibido por completo.