Situado en la localidad pacense de Zafra y dirigido por José Luis Entradas del Barco, el restaurante La Rebotica, especializado en el ámbito de los celíacos, nació en 2012, y por él ha recibido varios honores, como aparecer en la Guía Michelin España o en el portal extremeño de GastroExtrem, entre otros.

El éxito de este establecimiento se basa, según su propietario en un trato lo más cercano posible al cliente, de forma que al ser un restaurante pequeño siempre están intentando ofrecer un trato cordial e íntimo, preocupándose en todo momento por las necesidades del cliente, ofreciendo todas las opciones posibles, y cuidando siempre el mínimo detalle

Así las cosas, desde este local buscan que los cliuentes se queden con la calidad de su materia prima, donde priman los productos de procedencia extremeña. 

Con todo, lo primero que el propietario del establecimiento decidió hacer, fue adaptar todos sus platos al mundo de los celíacos, una enfermedad que él mismo padece, por lo que su cocina es casi totalmente gluten free. Además, tienen mucho cuidado con las demás intolerancias y alergias alimenticias como la lactosa o frutos secos; y con esto no quieren decir que no trabajen con estos alimentos.

De esta manera, cuando un cliente pide un plato que contiene algún alimento que le produce alergia, hacen todo lo posible para adaptarlo y que pueda comer lo máximo posible de su carta.

Esto sucede en buena parte es por culpa de la celiaquía del propietario, que como es natural está absolutamente concienciado con el tema. Cuenta que como cliente le ha pasado que en algunos sitios no disponían de una opción sin gluten, y tanto yo como mis acompañantes nos hemos visto comprometidos a la hora de pedir, ya que hay muchas cosas de las cuales yo no puedo comer, por lo que fue una de las cosas que me planteé a la hora de abrir el restaurante. Hay cosas que es imposible quitarle algún alimento, pero intentamos hacer todo lo posible.

José Luis siempre estoy creando y pensando, y si hay algo que le inspira lo intenta trasformar en un palto. Así las cosas, afirma que "lo principal de un cocinero son sus raíces, con las que ha crecido y vivido, los sabores que nos recuerdan a nuestra casa. Un cumulo de estímulos e influencias que dan lugar a platos únicos. La creatividad es imprescindible, se basa en esto, reinventar las elaboraciones tradicionales".