El Instituto de Agroquímica y Tecnología de Alimentos (IATA), ubicado en Paterna (Valencia), celebras estos días su 50º aniversario convertido en un referente internacional en ciencia y tecnología de los alimentos, tiempo desde el que ha investigado en numerosas ocasiones sobre aspectos relacionados con la celiaquía y la elaboración de alimentos sin gluten.
Sus estudios, que abarcan toda la cadena alimentaria, desde la microbiota intestinal hasta la conservación de los alimentos, han sido aprovechados y utilizados como referencia en no pocas ocasiones por las empresas dedicadas a la fabricación de alimentos sin gluten.
En el IATA se trabaja con el objetivo de mejorar la nutrición y la salud, aunque sin olvidar el placer de saborear los alimentos. Así, por ejemplo, este centro ha sido pionero en la investigación sobre la celiaquía, al idetificar una bacteria que mejora la calidad de vida de los celíacos al regular las alteraciones de la flora intestinal.
Otros de sus desarrollos más destacados han sido la elaboración de jamones con menos grasa, panes con más fibra y menos calorías, levaduras que mejoran el sabor y el aroma del vino, y zumos refrigerados con un sabor como el de los zumos recién exprimidos, entre otros.
“En estos 50 años de historia, el IATA se ha convertido en un centro pionero de referencia nacional e internacional en ciencia y tecnología de alimentos, y ha realizado una trasferencia efectiva de los resultados al sector industrial”, señala Cristina Molina Rosell, directora del centro. “Asimismo, la formación de técnicos, doctores y postdoctorales en agroquímica y ciencia de alimentos ha proporcionado miles de profesionales que ocupan puestos directivos, académicos y técnicos en universidades y en empresas de ámbito autonómico, nacional e internacional”, añade.
La investigación del IATA abarca todas las etapas de la cadena alimentaria, desde el funcionamiento de la población microbiana intestinal hasta la conservación de los alimentos. Sus grandes líneas de investigación son la ciencia de alimentos, la seguridad y calidad alimentarias, y la biotecnología.
“La actividad investigadora del IATA prosigue en la innovación en productos derivados de cereales, carnes y productos cárnicos, post-recolección de cítricos, estudios de percepción sensorial con consumidores, modelización de procesos de conservación de alimentos, envases inteligentes y control de riesgos bióticos y abióticos”, detalla la directora, para añdir que “a ello se une una intensa actividad en el ámbito de la biotecnología de alimentos, en el sector enológico, así como en el ámbito de las bacterias lácticas, su papel en el procesado de alimentos y su influencia en procesos metabólicos”.
El IATA se inauguró oficialmente en 1966 aunque sus investigaciones se iniciaron casi una década antes, en 1957, en del departamento de Química Vegetal del desaparecido Instituto de Química Alonso Barba, en el seno de la Facultad de Ciencias Químicas de la Universidad de Valencia.
La investigación del centro nació vinculada a los productos de la Comunidad Valenciana, como los cítricos y el arroz, pero con los años se ha ido diversificando y ha ido asumiendo nuevos retos, como por ejemplo el desarrollo de carnes más saludables, con el citado jamón bajo en grasa, el estudio de las propiedades benéficas para la salud de las bacterias lácteas y el tratamiento de cereales para alimentos multifibra.