Manuela García es intolerante al gluten, por lo que un buen día comenzó a investigar sobre cómo mejorar los productos sin gluten para devolver “la alegría a los alimentos”. Fruto de este trabajó nacieron las galletas Milola.
Manuela García, su hermana Yolanda y David Fitó iniciaron las ventas de Milola hace tres años, y desde entonces, las galletas de esta firma de Mataró han conquistado los paladares de ciudadanos de España, Francia, Andorra, Bélgica, Países Bajos, Suiza, Alemania, el Reino Unido, Canadá, Emiratos Árabes y Marruecos y pronto también los de Estados Unidos y Hong Kong.
Producen unas 40.000 galletas mensuales, cifra que tienen previsto doblar antes de acabar el año. La fabricación tiene lugar en Mataró, en unas nuevas instalaciones en las que Milola ha invertido 200.000 euros, dinero conseguido a través de Microbank .
En la actualidad están produciendo al 20 % de su capacidad, con lo que el margen de crecimiento es amplio. También están trabajando en el lanzamiento de más sabores y en otros productos como tostadas saladas y una harina sin gluten .
Prevén cerrar el año con una facturación de 800.000 euros y llegar a los 4 millones de euros anuales en dos años, pero “para conseguirlo tendremos que trabajar mucho”, reconoce Fitó.
Si tienen curiosidad por conocer más sobre el nomre de la marca... Milola es cómo llamaba a su madre una tía de las emprendedoras.