España entera está de cuarentena, y entre lo poco que podemos hacer es acudir al supermercado cuando sea necesario, por lo que los expertos se han afanado en darnos consejos a la hora de acudir a hacer la compra con las mayores garantías posibles.
Entre los primeros cosejos que todo el mundo debería entender destaca el que nos invita a ser cívicos y pensar en los demás. En este sentido, y relacionado con el mundo de las intolerancias alimentarias y más en concreto, con el entorno de la celiaquía, los expertos en sanidad recomiendan que evitemos comprar productos para intolerantes, ya sean sin gluten o sin lactosa o sin cualquiera del resto de alérgenos posibles, si no son estrictamente necesarios.
La recomendación va especialmente dirigida para todas aquellas personas que no son celíacas o no padecen ningún tipo de sensibilidad al gluten, o a cualquiera de los otros alérgenos, y que los consumen habitualmente ya sea por estar a la moda, por sus supuestas aportaciones para una mejor nutrición, o simplemente porque les resultan más apetecibles.
Como a nadie se le escapa, más que una recomendación es una petición, ya que este tipo de alimentos suelen ser más escasos en los lineales de los supermercados, a la vez que absolutamente necesarios para las personas que si padecen celiaquía u otra intolerancia alimentaria, constituyendo en la mayoría de los casos el único tratamiento para abordar su padecimiento.
La solidaridad en estos casos, consiste en no adquirir este tipo de productos sin gluten u otros alérgenos alimentarios si no es estrictamente necesario porque en el núcleo familiar hay alguna persona que los necesita por su condición de intolerante. De esta manera, quien los necesite de verdad tendrá menos dificultades a la hora de hacerse con ellos.
Además de esta importante indicación, los expertos han ofrecido otra serie de recomendaciones cuando se acude al supermercado a hacer la compra, tales como evitar coger sin guantes el carro o la cesta de la compra, ya que son herramientas en las que se suele acumular el virus al ser utlizados por todo el mundo. Además, es recomendable atender a todo lo que nos indiquen, y no tocar ni coger un producto si no tenemos claro que nos lo vamos a llevar.
En el caso de los productos frescos utilizaremos un guante extra, el que siempre utilizamos para coger la fruta, con el fin de tener doble seguridad, y siempre deberemos mantener una distancia de seguridad de un metro y medio con los dependientes y con el resto de los clientes.
Otro aspecto fundamental es que si tenemos cualquier síntoma no acudamos por el bien común a hacer la compra, además de evitar el dinero en efectivo pagando con tarjeta, ya que el dinero en metálido será portador de virus y viajará por las manos de muchas personas.